Como muchos héroes de historietas, la inspiración para la creación del hombre de acero fueron las revistas novelizadas - conocidas como pulps- y novelas de ciencia ficción.
El adolescente Jerry Siegel leía avidamente este género fantástico y con personajes como "Hugo Danner, el Gladiador" y "Doc Savage", servirían para espolear su imaginación encaminandolo para inventar su propio héroe ficticio.
En 1,933, Jerry comparte su idea con su amigo dibujante Joe Shuster para desarrollar el proyecto. Al principio, su superhombre no era benigno y no usaba ninguna especie de disfraz, despues hubieron cambios como el tono de su caracterización, su comportaamiento sería benevolente y usaría un disfraz básico que sería identificable (en los años venideros sería alterado durante su larga vida en el oficio heróico.)
Durante 5 años fueron rechazados por todos los sindictos de tiras cómicas para periódicos, diciendoles que era un material inapropiado y que no era lo que buscaban publicar (en 1,937, Siegel y Shuster no eran desconocidos en la industria de la historieta, ellos tenían personajes publicados como "Slam Bradley", "Dr. Occult", "Henri Duval", "Federal Men", "Radio Squad" y "Spy") el editor Harry Donenfeld trataba de reunir nuevo material para una nueva colección que llevaría el titulo de "Action Comics" y al llamar a McClure Syndicate, M.C. Gaines le ofreció el personje rechazado por todos los sindicatos.
Donenfeld aceptó y el hombre del mañana originalmente creado para ser leído en los diarios estadounidenses fue adaptado para ser impreso en formato de revista de historietas.
El primer número de Action Comics fue un triunfo - a pesar de cierto error en la impresión de las secuencias iniciales- pero eso recíen sería confirmado al notar que el cuarto número con el héroe con disfraz amarillo, rojo y azul en la portada, se agotó al instante. Ahí los editores descubrieron que tenían un éxito en sus manos.
Gracias a su creciente popularidad en 1,939, saldría una segunda colección titulada "Superman"(en su primer número, se arregló el error cometido en "Action" y se publicó de modo correcto la secuencia original.)
Así nació la leyenda y con su auge, inspiraría a muchos otros personajes fabulosos.
Escrito por Héctor Augusto Sovero Gastañeta.
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