Todo comenzó en una conversación dentro de un auto estacionado. Marv Wolfman había dado una fiesta y los que estaban dentro del auto eran Len Wein y Bernie Wrightson hablando sobre un cuento corto titulado “Cosa del Pantano” para uno de los comics de horror que publicaba National/DC.
Wrightson (con ayuda de Mike Kaluta, Alan Weiss, Jeff y Louise Jones) para ganar tiempo, todos se caracterizaron para posar como los personajes y sacarse fotografías como referencias para él poder dibujar más rápido, algo que ya mencione en CURIOSIDADES CON CRIATURAS CALOFRIANTES EN LOS COMICS.
Wrightson utilizaba este recurso de vez en cuando, “en esa época, yo estaba muy interesado en la fotografía. Yo realmente me sentí a gusto con la manera como resultó la historia y yo estaba apasionado sobre eso. Yo acaba de terminar con una chica en ese tiempo y de verdad que esta historia me conmovió por eso, así que yo vertí mi alma y corazón en eso.” Aunque Wrightson admitió estar loco por “Weezie” Jones (hoy Simonson) durante esa época, ella no es “la chica” que menciono antes, “Todos se morían por Louise, es de la clase que todos deseaban que fuera su chica, era muy dulce y extrovertida.”
Al salir a la venta LA CASA DE LOS SECRETOS #92, aparentemente fue la historieta mejor vendida del mes, superando a los súper héroes de la editorial. Las cartas de sus fieles lectores de su línea de horror llegaron en gran cantidad, haciendo que los mandamases se decidieran a sacar una colección con ese personaje.
Wrightson (con ayuda de Mike Kaluta, Alan Weiss, Jeff y Louise Jones) para ganar tiempo, todos se caracterizaron para posar como los personajes y sacarse fotografías como referencias para él poder dibujar más rápido, algo que ya mencione en CURIOSIDADES CON CRIATURAS CALOFRIANTES EN LOS COMICS.
Wrightson utilizaba este recurso de vez en cuando, “en esa época, yo estaba muy interesado en la fotografía. Yo realmente me sentí a gusto con la manera como resultó la historia y yo estaba apasionado sobre eso. Yo acaba de terminar con una chica en ese tiempo y de verdad que esta historia me conmovió por eso, así que yo vertí mi alma y corazón en eso.” Aunque Wrightson admitió estar loco por “Weezie” Jones (hoy Simonson) durante esa época, ella no es “la chica” que menciono antes, “Todos se morían por Louise, es de la clase que todos deseaban que fuera su chica, era muy dulce y extrovertida.”
Al salir a la venta LA CASA DE LOS SECRETOS #92, aparentemente fue la historieta mejor vendida del mes, superando a los súper héroes de la editorial. Las cartas de sus fieles lectores de su línea de horror llegaron en gran cantidad, haciendo que los mandamases se decidieran a sacar una colección con ese personaje.
Wrightson, que según él había salido de la ciudad en esas fechas, el anuncio fue toda una sorpresa, “Todos me estaban diciendo la gran noticia ‘¡vas a hacer un comic de la Cosa del Pantano!’ yo respondí ‘¿Cuál comic de la Cosa del Pantano?’ ¡Me tomo un gran esfuerzo recordar al personaje! así que fui a la oficina de Joe Orlando (el editor) y él dijo ‘si, nosotros queremos hacer una colección.’ Al instante, mi reacción fue ‘¿Qué estas tu loco? ¿Tu quieres hacer una historieta de época antigua?’ Joe me responde ‘no, nosotros vamos a cambiar ese entorno, lo actualizaremos y lo contaremos en términos modernos.’ Yo estaba un poco escéptico al principio, y yo realmente necesitaba que Len viniera y me hablara para interesarme en esto, yo necesitaba que dijera ‘esto no es lo que tú piensas, esto es lo que vamos a hacer: nosotros vamos a hacer este comic que tiene un monstruo como héroe y que nadie ha visto algo como esto. Nosotros vamos a poner lo mejor que tenemos para hacer un triunfo comercial sin sacrificar cualquier integridad.’ Una vez que yo oí eso, yo dije ‘bien, yo voy a firmar’, la forma como lo enfocamos fue una idea bastante innovadora.”
Alec Holland cae dentro de un pantano mientras esta en llamas y empapado de químicos, emergiendo como una criatura mas vegetal que humana, con enorme fuerza y habilidades regenerativas. Si revisamos la colección de esa época, veremos que se necesitaba un conflicto tras otro, un diferente enemigo por numero, algo para que el monstruo-héroe pudiera luchar y salir victorioso. Pero, desde el inicio no fue fácil, el Código de Comics estaba muy puntilloso, “ellos nos devolvieron el guión original para el comic porque Alec Holland murió y fue resucitado. Ellos dijeron que ‘esto significa que él es un muerto que camina y nosotros no permitimos zombis.’ así que se tuvo que re-escribir para que Alec Holland no muriese. Nosotros estábamos alistando el número 5, cuando recibimos una llamada presa del pánico de alguien del Código quien decía ‘¡ustedes no pueden hacer esto! ¡Esta figura esta desvestida!’ ¡Ellos estaban diciendo que la Cosa del Pantano estaba desnuda! Joe dijo ‘¿ustedes quieren que nosotros le pongamos encima pantalones púrpura?’ y ellos dijeron ‘¡si!’ Joe fue a “batear” por nosotros ante esas caras de total ignorancia de cabezotas y les mostró de principio a fin, panel por panel, demostrando que desde el primer numero, él había estado siempre desvestido ¡él era un monstruo! Eso no tenia genitales y sí los hubiera tenido, uno no podría verlo porque siempre estaba sombreado ¡Uno no podía ver la raya de su trasero, sí es que eso tenia un trasero!”
Ante la sensación de ponerse rancio en su arte y su creciente fastidio de hacer un comic bimensual que no iba hacia ningún lado, incluyendo la noción que estaría “casado” con el personaje para todo el mundo, Wrightson no quiso estar más en DC y aprovechó las invitaciones para ir a trabajar para Warren Publishing, “yo me sentí agotado al estar haciendo historietas a colores, yo me sentí quemado por LA COSA DEL PANTANO, ya me había aburrido hacer esas historias, yo volteó para mirar esos 10 números y digo ‘¡hombre, tu no puedes ver las líneas del trabajo y el color es todo oscuro y turbio!’ yo sentí que no podía extenderme y crecer en DC, todo lo hacían a color. Y la censura, ellos no me permitían hacer la clase de historias de horror que yo quería hacer, yo estaba realmente inquieto por trabajar con material en blanco y negro, así que fui a trabajar en las revistas de Warren que me pagaría $110 por pagina (lápiz y tinta) y regresándome los originales, algo que en esos años, DC no los devolvía, ellos me pagaban $65 por pagina dibujada e entintada. Hubo un abrumador montón de personas que se sentían casi furiosas por yo haber renunciado a la Cosa del Pantano, yo les descargue, ‘que se sientan mal si es lo que quieren, pero estar en DC no es lo que yo quiero’. Era mi vida y yo hice mi decisión.”
Escrito por Héctor Augusto Sovero Gastañeta.
Alec Holland cae dentro de un pantano mientras esta en llamas y empapado de químicos, emergiendo como una criatura mas vegetal que humana, con enorme fuerza y habilidades regenerativas. Si revisamos la colección de esa época, veremos que se necesitaba un conflicto tras otro, un diferente enemigo por numero, algo para que el monstruo-héroe pudiera luchar y salir victorioso. Pero, desde el inicio no fue fácil, el Código de Comics estaba muy puntilloso, “ellos nos devolvieron el guión original para el comic porque Alec Holland murió y fue resucitado. Ellos dijeron que ‘esto significa que él es un muerto que camina y nosotros no permitimos zombis.’ así que se tuvo que re-escribir para que Alec Holland no muriese. Nosotros estábamos alistando el número 5, cuando recibimos una llamada presa del pánico de alguien del Código quien decía ‘¡ustedes no pueden hacer esto! ¡Esta figura esta desvestida!’ ¡Ellos estaban diciendo que la Cosa del Pantano estaba desnuda! Joe dijo ‘¿ustedes quieren que nosotros le pongamos encima pantalones púrpura?’ y ellos dijeron ‘¡si!’ Joe fue a “batear” por nosotros ante esas caras de total ignorancia de cabezotas y les mostró de principio a fin, panel por panel, demostrando que desde el primer numero, él había estado siempre desvestido ¡él era un monstruo! Eso no tenia genitales y sí los hubiera tenido, uno no podría verlo porque siempre estaba sombreado ¡Uno no podía ver la raya de su trasero, sí es que eso tenia un trasero!”
Ante la sensación de ponerse rancio en su arte y su creciente fastidio de hacer un comic bimensual que no iba hacia ningún lado, incluyendo la noción que estaría “casado” con el personaje para todo el mundo, Wrightson no quiso estar más en DC y aprovechó las invitaciones para ir a trabajar para Warren Publishing, “yo me sentí agotado al estar haciendo historietas a colores, yo me sentí quemado por LA COSA DEL PANTANO, ya me había aburrido hacer esas historias, yo volteó para mirar esos 10 números y digo ‘¡hombre, tu no puedes ver las líneas del trabajo y el color es todo oscuro y turbio!’ yo sentí que no podía extenderme y crecer en DC, todo lo hacían a color. Y la censura, ellos no me permitían hacer la clase de historias de horror que yo quería hacer, yo estaba realmente inquieto por trabajar con material en blanco y negro, así que fui a trabajar en las revistas de Warren que me pagaría $110 por pagina (lápiz y tinta) y regresándome los originales, algo que en esos años, DC no los devolvía, ellos me pagaban $65 por pagina dibujada e entintada. Hubo un abrumador montón de personas que se sentían casi furiosas por yo haber renunciado a la Cosa del Pantano, yo les descargue, ‘que se sientan mal si es lo que quieren, pero estar en DC no es lo que yo quiero’. Era mi vida y yo hice mi decisión.”
Escrito por Héctor Augusto Sovero Gastañeta.
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